El
año pasado fue aprobada por el Parlamento Nacional la Ley de Promoción de
Ciclismo Urbano en Venezuela, que hasta la fecha no ha sido tomada en cuenta
por las autoridades para ser ejecutada.
A continuación les traigo
parte de una entrevista realizada por el periodista Erick Camargo al miembro
fundador de BiciAventuras Caracas, Luis Calderón.
Desde el 11 de noviembre de
este año, Venezuela cuenta con la Ley de Promoción de Ciclismo Urbano, primer
texto legal sobre la materia.
Para
analizar el contenido de esta importante ley, hemos conversado con Luis
Calderón, miembro fundador de BiciAventuras Caracas quien nos ha brindado su
perspectiva sobre los alcances e implicaciones de esta ley para el ciclismo
urbano. Los puntos destacados con lo cuales iniciamos la conversación son, la
prioridad para el otorgamiento de créditos de la banca pública y privada para
bicicletas; la creación y mantenimiento de Biciestacionamiemtos en parques,
centros de trabajos, centros comerciales y diferentes espacios públicos; así
como el plazo de 3 años para las alcaldías a generar condiciones normativas y
de infraestructura adecuada para la promoción del Ciclismo Urbano.
Luis
Calderón nos comenta que existen grandes expectativas con respecto a la ley, lo
cual consideran un importante paso positivo, pero que debe ser observado con
cautela y que se debe prestar atención en algunos aspectos que pueden degenerar
en complicaciones al ciclismo urbano. El principal problema es la gestión
administrativa y normativa a cargo del Ministerio del Deporte y no el encargado
en materia de tránsito terrestre, siendo la bicicleta un medio de transporte
alternativo. “Entonces habrá intereses encontrados en algún punto. Una cosa es
salir a hacer ejercicio, recrearse y otra es trasladarse por una necesidad de
movilidad”, comenta Calderón sobre este aspecto.
Calderón
hace hincapié en este aspecto, “Preocupa un poco que la herramienta esté del
lado del deporte más que del transporte. Suelen tener visiones muy diferentes
para desarrollar normativas. Lamentablemente aquí en Caracas todavía no toman
en serio el tema de la bici y su potencial como herramienta transformadora.
Seguimos siendo una sociedad donde la prioridad es el vehículo motor particular”,
señaló Luis Calderón.
A
este respecto debe tomarse en cuenta la exigencia a las alcaldías de en tres
años adaptar sus normativas y espacios urbanos acorde al desarrollo del
ciclismo urbano, lo que genera grandes confusiones, sobre todo entre las
visiones deportivas y de movilidad. “Siendo honesto, es muy probable que dejen
en el abandono a esta ley hasta el último momento; claro está también dependerá
de la presión que hagamos juntos como comunidad ciclista”, puntualizó Calderón.
Otro
aspecto negativo observado, en palabras de Luis Calderón, es que hay aspectos
que parecen ser restrictivos, sobre todo en el modo en que se puedan
desarrollar en las normativas municipales o reglamentos. Uno de estos es la
exigencia del uso de equipos de seguridad (cascos, rodilleras, etc.), que si
bien son elementos importantes para proteger al ciclista de accidentes, hay que
tener en cuenta que no todos tienen el poder adquisitivo para adquirir el
equipo completo, si acaso el casco; pudiendo generarse fenómenos de matracas y
extorsión de los cuerpos de seguridad del Estado contra los ciclistas. Otro
aspecto, es que es una ley que se dictó para todo un país, sin tomar en cuenta
las diferencias entre las grandes ciudades y pequeños pueblos, así como todas
las poblaciones intermedias; en las cuales las dinámicas de ciclismo urbano son
totalmente diferentes, el poder adquisitivo es distinto, la formación del
espacio público no se asemeja, lo que representa un reto para las localidades
adaptarse a lo exigido por la ley para la práctica del ciclismo urbano.
Así
vemos que en regiones rurales la mayoría de los ciclistas no utilizan estos
implementos de seguridad exigidos por la ley. También se debe tomar en cuenta,
sobre todo con respecto a la perspectiva del ciclismo urbano como un medio de
trasporte, la lucha por el espacio público de la calle, enfocada en el vehículo
automotor, el cual causa la mayor cantidad de accidentes y muertes a ciclistas,
que accidentes comunes que puedan tener estos. “La ley debería más bien darle
prioridad al ciclista en la vía y obligar a las autoridades a bajar la
velocidad de los vehículos motores en las zonas de mayor riesgo para el
ciclista. El ciclista es quien se ve más afectado por los accidentes justo por
la imprudencia en muchos casos de los conductores que no tienen idea de la
fuerza que generan ciertas velocidades”, aseguró Luis Calderón al tocar este
tema
Comenta
Calderón que lo ideal sería un desarrollo normativo que muestre transparencia,
que tome en consideración las necesidades concretas de los ciclistas de cada
localidad, que realmente se promuevan espacios para el cómodo uso de las
bicicletas, desarrollar servicios de préstamos y alquileres de las mismas para
desarrollar la movilidad ciclista. Un aspecto que celebra es la facilidad para
adquirir créditos bancarios, la flexibilización en el código de vestimenta,
pudiendo asistir a bancos y edificios públicos en pantalón corto, utilizado en
el ciclismo; lo que ya se está viendo con algunos mensajeros. Finaliza sus
consideraciones asegurando que “… toca esperar, y estar muy atento a las
intenciones que se pretenda dar para desarrollar cualquier normativa o
reglamento puntual”.
En base a esta ley, considero necesario presentar a las autoridades del municipio Maturín, un proyecto de ciclovias y no dejar que pase el tiempo y llegue la fecha limite de 3 años que se cumple en noviembre del 2.024 darle fiel cumplimento.
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